Puede que trabaje solo al principio, pero en algún momento necesitará contratar a alguien que le ayude a medida que su empresa crece. Por ejemplo, puedes contratar a un asistente o a alguien especializado en marketing para que te ayude a promocionar tu empresa.
Siempre que contrate a alguien, lo hará como empleado o como contratista. ¿Cuál es la diferencia?
Como organizador de bodas, si contratas a personas para que te presten servicios como música o fotografía, lo más probable es que sean contratistas autónomos (a los que encontrarás a través del boca a boca o incluso en las Páginas Amarillas). Sin embargo, las demás personas que trabajan para su empresa pueden ser empleados o contratistas, y existen diferentes requisitos fiscales para ambos. Para más información sobre la fiscalidad laboral de las pequeñas empresas, consulta la Oficina Australiana de Impuestos:
www.ato.gov.au (haga clic en "Empresas" y, a continuación, en "Su situación empresarial", haga clic en "Emplear a personas" y "Aspectos esenciales para el empleador").
Cuando contratas a alguien, también tienes que tener en cuenta las cuestiones de salud y seguridad, la indemnización de los trabajadores, el salario mínimo y el seguro de desempleo, sobre todo en lo que respecta a tu Estado o Territorio. Puede obtener más información en:
www.business.gov.au (en "Business topics", haga clic en "Employing people")