Lo que buscan los empresarios
En primer lugar, los empresarios buscan a alguien que pueda hacer un buen trabajo. Pero también buscan a alguien con una actitud positiva y grandes dotes interpersonales. Así es como algunos empresarios han descrito lo que buscan:
La persona adecuada para nosotros tendrá excelentes habilidades interpersonales, una actitud optimista y se llevará bien con nuestros clientes y el personal. - Empresa de catering
Un candidato al que le guste trabajar con gente siempre lo hará bien. - Recurso
A la hora de contratar buscamos buenas dotes de comunicación y una actitud positiva. Deben tener don de gentes para hacerlo bien. - Tienda de novias
Los empresarios quieren saber si se lleva bien con sus clientes, si es eficiente, cortés, amable y profesional. Si puede demostrar estas cualidades en una entrevista, le irá bien.
Los expertos afirman que nos formamos una impresión en los primeros segundos de conocer a una persona, así que sea consciente del impacto que está teniendo desde el principio. Tu actitud y tu capacidad para llevarte bien con la gente se están juzgando desde el primer momento en que entras en la sala.
Para causar una buena impresión, debe ir bien arreglado y vestido profesionalmente.
Además de ser entusiasta, sea positivo. Evite decir cosas negativas, sobre todo de antiguos empleadores. Céntrese en el valor que aportaría a la empresa como empleado, y no en lo que quiere obtener del trabajo. Por ejemplo, no hable de cuántas vacaciones quiere ni mencione el salario hasta que lo haga el empleador.
Sobre todo, quieres que el entrevistador piense: "¡Qué buena persona! Sería estupendo tener a alguien así trabajando aquí".
Preguntas
Éstas son algunas de las preguntas habituales en las entrevistas:
Debe estudiar antes de la entrevista para conocer los antecedentes de la empresa que le va a entrevistar. Así podrás prepararte para las preguntas que te hagan. Lee su página web, si la tienen. O pásese por la oficina y recoja cualquier material promocional que puedan tener, o su informe anual (si son lo bastante grandes como para tener uno).
Prepárese también para las preguntas de comportamiento, que le obligarán a pensar un poco más. Por ejemplo:
Puedes responder de forma hipotética imaginando lo que harías, pero siempre es mejor si puedes basarte en experiencias de la vida real: es posible que en tu último trabajo hayas tenido que tratar con un cliente difícil y puedas citarlo como ejemplo. El empresario quiere saber cómo resuelves las situaciones difíciles.